Por La Pluma Divina
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28 de septiembre de 2024
¿Tengo que congregarme? ¿Con quién? No digas “amén, amén” a todo, en ignorancia, escudriña Las Escrituras, alcanza el conocimiento de La Verdad Completa Sin Adulterar para que nadie te engañe con doctrinas falsas. Uno de los “atajos” más peligrosos al estudiar Las Escrituras es “sacar textos del contexto”, algo en lo que lamentablemente para ellos son “grandes especialistas” los cristianos, pero no sólo ellos… Hay que tener muchísimo cuidado con esto. Aquí tenemos un conocido ejemplo: “no descuidando nuestras propias reuniones en las asambleas, como algunos han hecho una costumbre”. De todo este capítulo y sus profundas enseñanzas sólo “te sacan” este “versículo” del contexto y te dicen: “tienes que congregarte, es un mandamiento” o algo parecido. Pero, ¿de qué está hablando?, ¿de que tienes que congregarte en tu “denominación” para que te enseñen herejías contra La Toráh?, ¿de que tienes que congregarte en “la kehiláh que está de moda y es muy popular” para que te instruyan en Talmud, Kabbalah y Zohar?